Confederación

5 de Marzo de 1974

Estoy registrando esto en forma de informe porque no tenía el micrófono encendido y, por tanto, no puedo aportar una transcripción. Estoy escribiendo tanta parte del mensaje que recibí como puedo recordar y anotando la experiencia en su conjunto para el registro. En retrospectiva, siento que me ayudó a aprender a hacer un mejor trabajo canalizando.

Ayer, día cuatro, tuvimos un grupo muy numeroso para la meditación y Don no estuvo aquí. Tampoco estuvo R, ni M. R y M son ahora los más avanzados entre los nuevos canales y Don es el canal más antiguo del grupo y muy fiable. Hay muchas personas en este grupo que han estado recibiendo acondicionamiento. Ocho personas estuvieron aquí que han estado recibiendo acondicionamiento, de eso estoy seguro. Aún no se han desarrollado realmente como canales. Han canalizado un mensaje cada una. Y estos fueron muy cortos.

Simplemente no teníamos microfonos encendidos. Sentí que estaba listo para canalizar; escuché o fui consciente de ciertos pensamientos que llegaron a mi mente y los dije. Por supuesto, más tarde tuve muchas dudas sobre si los pensamientos eran míos o si realmente fueron canalizados; especialmente porque no había un canal más fiable allí que me corrigiera si cometía un error.

El mensaje trataba principalmente de un saludo para todos y de una declaración de lo complacidos que estaban Hatonn y Laitos de estar allí. Y que condicionarían a todos los presentes que lo desearan e intentarían usar, muy brevemente, a cada nuevo instrumento que pudieran utilizar. No usaron a nadie más que a mí. Aunque después dos otros instrumentos afirmaron que podrían haber hablado, pero que fueron “cobardes”. Es muy fácil ser “cobarde” porque cuando empiezas a recibir un pensamiento lo único que obtienes es lo primero, que generalmente es “Yo soy Hatonn”. Y a menos que lo digas en voz alta, no pasarán a la siguiente parte, a menos que te lo digas a ti mismo. Así fue como me armé de valor al principio: me lo dije a mí mismo, llegué como hasta el primer párrafo y me di cuenta de que iba a recibir un mensaje.

Entonces, hoy no había nadie aquí por primera vez en mucho tiempo y mi meditación fue solo y había estado pensando para mis adentros todo el día y, tantas veces como creía en la canalización de otras personas, tuve el predecible problema de la duda en mí mismo, y así cuando me senté a meditar y estaba meditando pensé para mí: “Hatonn, si esto realmente está ocurriendo, quiero acondicionamiento ahora”, y comencé a recibir acondicionamiento y cuando finalmente se me abrió la mandíbula y apareció ese “yo” inconfundible, lo dije. Y, efectivamente, recibí un pensamiento y llevó a otro y a otro, así que continué y canalicé a Hatonn para mí mismo. Y fue corto. Dijo: “Soy Hatonn. Me siento muy privilegiado de estar con ustedes. Me complace ver que están meditando. Les recomendaré que se relajen más porque si desean convertirse en un canal y si desean que los dirijamos, no hay forma de que lo hagamos si ustedes mismos se están desviando.” Hubo una pausa después para que el pensamiento calara y luego simplemente dijo: “Los dejo en el amor y la luz del Creador infinito. Soy Hatonn.” Así que ahora puedo hacerlo y tuve la sensación de que realmente había terminado. Podía sentir que el contacto se había levantado y quise hacer una pregunta, así que dije: “Hatonn, ¿puedo hacer una pregunta?” y de inmediato pude sentir que había presencia como si se hubiera encendido una computadora y estuviera arrancando o algo así y dije: “¿Cómo puedo meditar mejor?” Y obtuve el pensamiento: “No pienses en nada. Estás pensando en algo.”

Fin del informe.