Joshiah

5 de Agosto de 2001

Creas este espacio y este tiempo para que tengamos la oportunidad de entrar y compartir en tu realidad; para que podamos entrar en tu nivel vibratorio. Y, una vez más, expresamos nuestra gratitud por estas oportunidades que nos brindas.

Ahora, sugerimos continuamente que, si decides expresar la intención, hay una multitud de entidades que nos acompañan a este espacio sagrado que has creado. Esas entidades están agradecidas por la oportunidad de interactuar e intercambiar contigo telepáticamente en lo que hemos denominado el nivel silencioso. Y así, si eliges expresar la intención, te aseguramos que esa interacción ciertamente ocurrirá y de hecho ocurre.

Ahora, como es nuestra costumbre, les pedimos un momento de silencio para permitir que las entidades que estarán con nosotros entren en esta habitación. Asimismo, les pedimos que expresen la intención de un mayor adelgazamiento del velo, ya que hay muchas más que esperan con ansias la oportunidad de entrar y compartir con ustedes en su realidad. También utilizaremos ese momento de silencio para equilibrar y potenciar la energía dentro de este espacio, y para afinar nuestra conexión con nuestro amigo (el canal). Así que, si son tan amables, les pedimos un momento de silencio, por favor.

Bien, pues, ciertamente tenemos una asamblea bastante única de entidades con nosotros esta tarde. Verán, cada uno de ustedes que es nuevo en nuestra interacción trae consigo un grupo de entidades que esperan con ansias esta oportunidad de interactuar con ustedes y de compartir con ustedes en su nivel vibratorio. Ahora bien, por supuesto no es necesario asistir a este tipo de interacción para poder comunicarse o tener contacto con esas entidades, pero aun así, muchos de ustedes creen que es necesario. Y así como sostienen esas creencias, crean la realidad que las respalda. Por eso tienen mucho más éxito cuando participan en un grupo como este, donde hay un tema común, una intención compartida, de permitir que estas entidades interactúen, compartan e intercambien con ustedes.

Sin embargo, nuevamente, ciertamente no es necesario que asistas a este tipo de sesión o actividad para que puedas experimentar ese intercambio y beneficiarte de esa transmisión de información con entidades que existen fuera de tu nivel vibratorio, fuera de tu realidad. De hecho, mientras te encuentras en estados alterados de conciencia, ya sea en tus sueños o en estados de meditación, ciertamente interactúas de forma continua con esas entidades. No obstante, es dentro de tu conciencia (estado consciente) donde tienes la dificultad de creer que posees en tu interior la capacidad para esa interacción, y por eso este tipo de sesiones grupales, donde hay una intención común, ayudan a intensificar la energía y las entidades presentes en este espacio sagrado que has creado. Como resultado, experimentas lo que parece ser una transferencia de información mucho más exitosa.

Nuevamente, sugerimos que existe un intercambio de información en ese nivel silencioso, si eliges expresar la intención y permitir que esa interacción ocurra. Porque, una vez más, las entidades que existen fuera de tu nivel vibratorio no pueden entrar en tu nivel vibratorio, no pueden interferir en la creación ni en las actividades dentro de tu nivel vibratorio debido a tu elección de establecer y mantener el velo. Esa energía, que es similar a un campo de tipo electromagnético, impide la interferencia externa en tu nivel vibratorio y te permite crear esta realidad sin ningún tipo de interferencia. Sin embargo, cuando expresas la intención de permitir que ocurra esa interacción en lo que hemos denominado el nivel silencioso, entonces se produce una transferencia de información que es mucho más precisa, mucho más completa, que la transferencia de información que puedes recibir mediante el uso limitado de un vocabulario, como lo intentamos al expresarnos a través de nuestro amigo Elias (el canal).

Ahora bien, en ocasiones puedes sentir que no has experimentado mucho intercambio de información en ese nivel silencioso. Sin embargo, te aseguramos que, en varios niveles de tu conciencia o subconsciencia, por así decirlo, ciertamente estás experimentando —y tienes la oportunidad de experimentar— esa interacción. Y los resultados de dicha interacción pueden no manifestarse sino hasta lo que, para ti, parece ser algún momento futuro dentro de este marco temporal algo imaginario en el que existes. Esos resultados pueden llegar a tu nivel consciente en forma de intuiciones o sincronicidades que parecen ocurrir mágicamente en tu vida cotidiana. Son el resultado de haber expresado la intención y de haber permitido que otras entidades interactúen e intercambien contigo.

Ahora bien, debido a la energía que existe en este lugar, en este espacio sagrado que han creado esta tarde, sugerimos que existe una posibilidad muy fuerte de que experimenten nuevamente interferencias con su sistema de grabación. Verán, no siempre tenemos control sobre sus aparatos. En ocasiones, es su propia energía, y la energía de las entidades que existen y entran en este espacio sagrado, la que causa una interacción con su sistema de grabación que da como resultado que no se registre nada en forma de palabras en sus cintas magnéticas. Sin embargo, lo que sí se graba es la energía presente en este lugar, la cual está interfiriendo, y desde su perspectiva, incluso llegando en ocasiones a destruir la capacidad de su sistema de grabación para funcionar correctamente. No obstante, una vez más sugerimos que eso no está completamente bajo nuestro control. Simplemente señalamos que, debido al número de nuevas entidades de su nivel vibratorio que están con nosotros esta tarde, también hay entidades del otro lado del velo que son nuevas y que están dando la bienvenida a esta oportunidad de interactuar e intercambiar con cada uno de ustedes. Si eligen o no esa interacción, depende de ustedes.

Ahora bien, hay otro fenómeno bastante interesante que ocurre, y que les hemos mencionado en muchas ocasiones. Y es que las entidades que interactúan con ustedes están compartiendo información que ustedes ya tienen dentro de sí mismos. Verán, dentro de este nivel vibratorio existe una creencia bastante común entre muchas de las entidades que lo habitan: que las entidades que están fuera de su nivel vibratorio, de algún modo, tienen acceso a información a la que ustedes no pueden acceder. Y sugerimos que eso simplemente no es cierto. De hecho, ustedes tienen acceso a información a la que nosotros no podemos acceder.

Verán, ustedes existen dentro de un nivel vibratorio que restringe el acceso de otros mediante el mantenimiento del velo. Y al restringir ese acceso de otros a su nivel vibratorio, también restringen a las entidades externas el acceso a la información que ustedes poseen dentro de este nivel vibratorio, la cual está contenida en cada uno de ustedes. Por eso, muchas veces, la información que expresamos y la información que ustedes reciben en este intercambio a nivel silencioso es, en realidad, un intercambio de información que ya tienen dentro de sí mismos, que desean hacer consciente para ayudarse en esta transformación hacia la nueva era y hacia la nueva energía; para ayudarse a comprender y a volverse competentes en la creación consciente de su realidad. Así que, nuevamente, muchas veces ese mensaje silencioso no es más que un reflejo de la información que ya está contenida dentro de ustedes.

Verás, las entidades que entran en este espacio sagrado que has creado vienen, ciertamente, a interactuar contigo, pero sobre todo vienen a aprender de ti. No vienen a enseñarte. No vienen con información a la que tú no tengas acceso, sino que vienen a aprender de ti, de la información que tú contienes y a la cual ellas no pueden acceder a menos que tú lo permitas, a menos que expreses la intención y hagas esa elección. Estas entidades que desean interactuar contigo están, sin duda, ansiosas por aprender de ti. Desean compartir las experiencias y sentimientos que tú vives en esta realidad, y a cambio te ofrecen ese sentimiento de apoyo incondicional y amor sin fin. Te ayudan a comprender que, en algún nivel de tu conciencia, eres una Parte de Dios y eres responsable de la creación de esta realidad, y que la creas desde una posición de amor. Te ayudan a entender que tienes la oportunidad de experimentar ese amor y de llevarlo a un estado de conciencia en el que puedas apreciarlo y aplicarlo a ti mismo y a tus creaciones cotidianas. Y a comprender que eres una Parte de Dios y que, en efecto, eres capaz del amor propio necesario para crear la realidad que deseas.

Ahora bien, te hemos hablado muchas veces sobre las creencias, sobre cómo las creencias preceden a tu realidad. Primero sostienes la creencia, y luego creas la realidad que respalda esa creencia. No funciona al revés, aunque a veces, dentro de tu nivel vibratorio y debido a la creación y mantenimiento del velo, parezca que sí. Parece que ocurre un evento, y a partir de ese evento comienzas a creer. Sin embargo, te sugerimos que es al contrario: primero crees, y luego, a partir de esa creencia, creas el evento que respalda tu sistema de creencias. Por eso, se vuelve fundamental que comprendas cuáles son tus creencias. Si deseas cambiar tu realidad, si deseas crear la realidad que anhelas, si deseas transformarla, entonces debes transformar tus creencias.

Ahora bien, ese se convierte en un concepto algo difícil de comprender en ocasiones. Porque, como hemos sugerido, traes sistemas de creencias a este periodo encarnacional que has desarrollado y formado en otros periodos de encarnación, o en los periodos entre encarnaciones, \[en ese momento en que estás entre existir en esta conciencia, en esta realidad]. Verás, cuando estás entre estados de encarnación —evitamos usar el término “morir”, porque no puedes morir, nunca mueres realmente— pero entras en un estado entre encarnaciones. Durante ese periodo, aún no has salido completamente de este nivel vibratorio particular en el que existes. En ese momento, todavía existes, hasta cierto punto, dentro de las limitaciones del velo que restringe tu comprensión de quién eres y qué eres realmente. Y en ese estado, tuviste la oportunidad de formar sistemas de creencias que traerías contigo al periodo encarnacional, con el fin de ayudarte a crear las realidades que deseas, para experimentar los sentimientos que anhelas vivir.

Ahora bien, se vuelve algo complicado intentar explicarte cómo sucede realmente, porque crees en un marco temporal lineal. Crees que hubo un momento en que las cosas comenzaron y un momento en que terminarán; crees que esta vida tuvo un inicio y tendrá un final, que hay una pausa entre vidas cuando estás en los periodos entre encarnaciones, y que luego hay un nuevo comienzo en la siguiente vida. Sin embargo, todas esas vidas particulares y los estados entre encarnaciones, toda esta realidad, existen dentro del ahora. Y por eso se vuelve un concepto muy difícil de explicar: qué es realmente el “ahora” y cómo esos sistemas de creencias que sientes que has traído desde los periodos entre encarnaciones hacia esta vida, en realidad son sistemas de creencias que están ocurriendo simultáneamente con las experiencias que tienes en este periodo encarnacional, con las experiencias que tienes cuando estás entre encarnaciones, y con las experiencias que estás teniendo en todas las demás encarnaciones que ocurren al mismo tiempo. Así que, cuando te sugerimos que es posible expresar la intención de dejar caer los antiguos contratos y el karma —si mantienes esos sistemas de creencias— puedes permitir que se disuelvan ahora. Puedes salirte de ese sistema de creencias.

Estamos usando esos términos y esas palabras para adaptarnos a tu comprensión. Verás, todo ocurre en el ahora. Y como todo ocurre en el ahora, cuando expresas la intención y crees plenamente que tienes dentro de ti la capacidad de permitir que esos sistemas de creencias se desvanezcan, entonces estás alterando simultáneamente las realidades de todos los periodos de encarnación y de todos los periodos entre encarnaciones. Así que parece que los sistemas de creencias están cayendo, y se vuelve muy difícil identificar exactamente cuál era ese sistema de creencias, porque comienzas a alterar todas las realidades. Una vez más, ese se convierte en un concepto muy difícil de comprender para ti, y difícil de creer: que puedes afectar el pasado o que puedes afectar el futuro.

El futuro, por supuesto, parece ser mucho más fácil de entender para ustedes porque, dentro de su marco temporal lineal, creen que aún no ha ocurrido. Y si no ha ocurrido, entonces pueden cambiarlo, pueden alterarlo. Ahora bien, hasta este momento, han tenido —dentro de lo que consideran sus encarnaciones pasadas— la capacidad de predecir el futuro. Verán, algunos de sus llamados profetas, algunos de aquellos que tenían la habilidad de ver el futuro, comprendían que en ese momento el futuro estaba, por así decirlo, ya establecido. Y por eso podían predecirlo, y hacerlo con bastante precisión.

En ocasiones, el futuro no resultó ser exactamente como los profetas lo habían predicho. O en otros momentos, el profeta utilizaba analogías para presentar una idea de lo que podría denominarse su futuro. A medida que comenzaron a predecir el futuro —y en muchos casos lo hicieron con bastante precisión, incluso siglos adelante dentro de su marco temporal lineal— no siempre fueron absolutamente exactos en las circunstancias que rodeaban esas predicciones. Sin embargo, resulta bastante interesante que, si piensas en tu pasado y lees los relatos de ciertos historiadores sobre eventos que ocurrieron en él, descubrirás que todos varían. Verás que ninguno es exactamente igual. Incluso cuando tú mismo intentas explicar o relatar tu pasado, notarás que esos relatos varían de una persona a otra, tal como las predicciones del futuro varían de un individuo a otro.

Ahora bien, otro concepto bastante interesante a considerar es que, si comprendes que puedes alterar el futuro y reconoces que algunas de las predicciones sobre lo que ocurriría en el futuro no fueron completamente precisas o no fueron exactamente iguales, entonces quizás también puedas entender que los relatos sobre tu pasado tampoco son completamente precisos o iguales entre sí. Y así, es tan fácil alterar tu pasado como lo es alterar tu futuro.

Entonces, cuando expresas la intención de permitir que esos sistemas de creencias —que sientes que has traído a este periodo de encarnación— se disuelvan, en cierto sentido estás alterando tu sistema de creencias por completo. Y ese sistema de creencias tiene un efecto sobre todas las encarnaciones que estás experimentando. Por eso se vuelve muy difícil para ti comprender con claridad cuál es esa creencia. Se vuelve muy difícil cuando despiertas de tus sueños y sientes que, de algún modo, has recibido una inspiración, pero no puedes recordar exactamente qué es. Sin embargo, sabes que tendrá un impacto profundo en tu vida, y de repente tu vida comienza a desarrollarse de una forma muy diferente a como lo había hecho en el pasado. Pero, en cierto sentido, has cambiado toda la realidad que estás experimentando: el pasado, el presente, el futuro y los estados entre encarnaciones.

Cuando estás en ese estado de sueño, en ocasiones logras vislumbrar lo que es el ahora. En ese momento, tienes la oportunidad de comprender que muchos años pueden pasar ante ti en un instante. Puedes estar involucrado en una actividad que entiendes como parte de tu pasado y, de repente, estar en el presente o incluso en el futuro, todo en un abrir y cerrar de ojos. Porque, verás, todo es simultáneo, y en ese instante se te brinda la oportunidad de vislumbrar lo que realmente es el ahora.

Verás, hay dos sistemas de creencias particulares que has establecido dentro del velo y que hacen muy difícil para ti comprender cómo funciona tu creación en su totalidad. Uno de esos sistemas de creencias es que existe un marco temporal lineal, que hay un comienzo y un final. El segundo es la creencia de que existe el espacio, de que de algún modo estás separado de los otros niveles vibratorios por una gran cantidad de espacio. Y eso, simplemente, no es cierto. Estás separado únicamente por un nivel vibratorio; existes en el mismo tiempo y en el mismo espacio.

Cuando comienzas a sostener ese concepto del ahora, cuando empiezas a comprender cómo todas tus encarnaciones se ven afectadas por las elecciones, decisiones y sistemas de creencias que mantienes, se vuelve mucho más fácil entender que no existe tal cosa como lo que dentro de tu realidad llamas "muerte". No mueres, simplemente alteras estados de conciencia. Ahora bien, podrías sentarte aquí y decir: “Bueno, eso no es del todo cierto, porque hay entidades con las que he interactuado en este nivel vibratorio y que ciertamente han muerto.” Una vez más, sugerimos que eso se debe a tu sistema de creencias basado en un marco temporal lineal, y a tu dificultad para comprender el ahora y entender que todas las realidades que experimentas están ocurriendo al mismo tiempo.

Tú existes dentro de este marco temporal lineal que has establecido con el fin de dar legitimidad a esta realidad, para intensificar los sentimientos que estás experimentando dentro de ella. Sin embargo, cuando estás en ciertos estados de conciencia, en ocasiones comprendes claramente que esta realidad es muy ilusoria, que no es real, que es la menos real de todas las realidades en las que existes. No obstante, cuando estás en tu estado consciente, sin duda se siente real. Y resulta bastante irónico que, cuanto más crees que es real, más difícil te resulta alterarla.

Ahora bien, surge una paradoja con ese tipo de pensamiento, y es: “Bueno, si esto no es real, entonces ¿por qué lo estamos haciendo? Si todo esto es ilusorio, ¿por qué nos sometemos a tanto sufrimiento? ¿Cuál es el propósito?” El propósito es que tú elegiste entrar en este nivel vibratorio con el fin de crear realidades sin tener el entendimiento de quién eres y qué eres realmente. Luego, al crear esa realidad, tienes la oportunidad de experimentar una gama de sentimientos que no sería posible si comprendieras que tú eres quien crea esa realidad, que eres una Parte de Dios. Gracias al mantenimiento del velo, tienes la oportunidad de experimentar un rango mucho más amplio de emociones y sensaciones.

Así que, ciertamente, cuando existes dentro de este marco temporal lineal, puedes experimentar la muerte de alguien y vivir todas las emociones y sentimientos que acompañan esa experiencia. Sin embargo, te aseguramos que, en algún nivel, sigues interactuando con esa entidad. En algún nivel comprendes que no existe tal cosa como la muerte, sino simplemente una alteración de la realidad en la que existes. Y en ese nivel, continúas interactuando y compartiendo con aquellas entidades que sientes que han dejado este nivel vibratorio.

Verás, resulta bastante interesante que, en su mayoría, esas entidades en realidad no han abandonado tu nivel vibratorio. Aún existen dentro del contexto de las limitaciones del velo. No estamos sugiriendo que no puedan dejar esta realidad vibratoria si así lo desean, pero la mayoría de las entidades no elige hacerlo. Más bien, eligen reencarnar para continuar dentro de esta experiencia. Y aunque a veces este entorno pueda parecer bastante duro, no obstante, está en la vanguardia de la creación. No existe en ningún lugar de toda la creación un duplicado de la realidad que estás experimentando. En ninguna parte de la creación existe otro nivel vibratorio que opere bajo las limitaciones del velo y que restrinja la interferencia de entidades que existen fuera de tu nivel vibratorio.

Así que esta es una situación bastante única que tú has creado y en la que estás interactuando. Y, en su mayoría, eliges permanecer dentro de este nivel vibratorio. Incluso si eliges morir —como lo expresas— simplemente alteras tu estado de conciencia y no has abandonado por completo este nivel vibratorio. Sin embargo, ciertamente, cuando te encuentras en lo que percibes como esos periodos entre encarnaciones, eres mucho más consciente de quién eres y qué eres en realidad.

Una vez más, se vuelve un concepto bastante difícil de explicar: que todo eso ocurre simultáneamente. No hay separación entre quién eres y qué eres. No hay separación entre tú y tu ser superior. No es algo que tengas que ir a buscar. Es algo cuya comprensión eliges restringir mediante el fuerte mantenimiento del velo. Tú eres esa Parte de Dios. No es algo separado de ti que debas encontrar. Existe en cada una de las células de tu ser. Ese ser superior es quien y lo que tú eres. No está separado de ti en absoluto. Esa parte de ti que existe entre los estados de encarnación es quien tú eres. No está separada de ti. Interactúa contigo, y tú con ella, de manera continua para seguir creando la realidad que deseas y que estás experimentando. Así que, en verdad, nunca mueres.

Si en realidad nunca mueres, entonces la siguiente pregunta es: “Bueno, ¿por qué no vivimos para siempre?” Y esa es una muy buena pregunta: ¿por qué no viven para siempre? Verás, cuando existías en los periodos lemurianos, cuando comprendías lo que era el ahora, no había un límite de tiempo para tu existencia dentro de este nivel vibratorio en estado de conciencia. Era posible para ti entrar y salir de esta conciencia con facilidad, comprendiendo que, de hecho, una parte de ti existía fuera de esta conciencia. Luego entraste en los periodos atlantes —lo que podríamos llamar el final de los periodos lemurianos y el preámbulo de la Atlántida. En ese momento, comenzaste a existir dentro de este nivel vibratorio, dentro de esta conciencia y dentro de lo que tú llamas forma humana, durante periodos de tiempo muy prolongados, que en tu marco temporal lineal actual equivaldrían a hasta mil años. En ese entonces, era bastante común existir entre quinientos y mil años. Sin embargo, elegiste poner restricciones al tiempo de existencia dentro de esta conciencia. Y lo hiciste por una razón que, desde el nivel de conciencia, te pareció muy legítima: cada vez que reencarnas, tienes la oportunidad de venir con lo que podrías llamar una "página en blanco".

Ahora bien, por supuesto no olvidas todo lo que ocurrió en tus otros niveles vibratorios. Definitivamente no. No olvidas lo que ocurrió en tus otros periodos de encarnación, aunque parezca que sí. Es mucho más fácil olvidar. Verás, cuando eres una entidad joven, cuando naces por primera vez en este nivel vibratorio, tienes dentro de ti una comprensión muy consciente de quién eres y qué eres. En ese momento, recuerdas cómo era estar entre encarnaciones. Sin embargo, has elegido establecer un ritmo de crecimiento en el cual avanzas más allá de esa comprensión… y olvidas. Y comienzas a pensar que todo este periodo de encarnación es completamente nuevo. Tienes la oportunidad, al parecer, de experimentar eventos y situaciones que nunca has vivido antes, y todo te parece completamente nuevo.

Así que avanzas a través de tu infancia y adolescencia, experimentando todas esas cosas que parecen completamente nuevas… aunque ya las has vivido miles de veces antes. Sin embargo, esta vez te parecen nuevas —esa es la profundidad con la que ocultas el recuerdo de quién eres y qué eres realmente. Tienes, una vez más, la posibilidad de experimentar esos sentimientos, esos sentimientos intensos. Es bastante irónico que, dentro de tu nivel vibratorio actual, experimentes lo que llamas, por ejemplo, un primer amor, y cuando eso termina, tiene un efecto devastador sobre tu realidad. Sientes que todo ha llegado a su fin. Sientes que ha sido la mayor catástrofe que te ha ocurrido… y dentro de este periodo encarnacional, lo es. Solo que no recuerdas que ya lo has vivido muchas, muchas veces antes, y que en realidad no es algo nuevo. Y así continúa con todas tus experiencias que crees que son “la primera vez”. Pero en realidad no lo son… solo que es la primera vez que puedes recordarlo.

Así que, dentro de tu comprensión, se volvió mucho más relevante acortar tus vidas para poder salir de ese periodo encarnacional y luego reencarnar y volver a experimentar todas esas cosas, en lugar de tener que —como sentías desde tu conciencia— existir quinientos o mil años antes de tener la oportunidad de regresar y vivirlo nuevamente. Es como subirte a un juego en una feria, y das vueltas y vueltas en el mismo recorrido, experimentando todos los fenómenos posibles que ese juego te ofrece. Pero después de un tiempo, el paseo deja de ser tan interesante. Entonces, sales del parque, pierdes la memoria del juego… y luego decides regresar y subirte otra vez, y todo te parece completamente nuevo. Has olvidado cómo fue la primera vez.

Bueno, tenía mucho más sentido para ti acortar el paseo, de modo que, en cuanto hubieras experimentado los sentimientos y comenzaras a sentir que ya lo sabías todo, salieras del carnaval, olvidaras, volvieras a entrar… y te subieras al juego otra vez. Y todo volvía a ser completamente nuevo, y tenías la capacidad de crear nuevas realidades para experimentar esos sentimientos intensos una y otra vez.

Ahora bien, no se trata de que tengas que “hacerlo bien”. Verás, muchos de tus sistemas de creencias sostienen que reencarnas porque no lo lograste, porque necesitas corregir errores para poder avanzar. Pero no es así en absoluto. No tienes que hacer nada “bien”. No puedes fallar. No importa lo que hagas dentro de este nivel vibratorio, te aseguramos que no puedes fallar en regresar al nivel vibratorio del que viniste. Esa fue una de las condiciones que tú mismo estableciste antes de pasar tras el velo: que no podías fallar. Así que no tienes que progresar. No tienes que seguir reencarnando para subir algún tipo de escalera hacia una supuesta ascensión que finalmente te libere de la reencarnación. Para nada. Reencarnas porque lo eliges. Y podrías abandonar este nivel vibratorio en cualquier momento que lo decidas. Pero eliges quedarte, y eliges quedarte para experimentar esos sentimientos. Y eliges acortar tu vida con el fin de experimentar esos sentimientos en una sucesión mucho más rápida.

Ahora estás entrando en una nueva energía, donde hay quienes, dentro de tu realidad, predicen que tienes la oportunidad de alargar tu esperanza de vida. Y ciertamente, eso es verdad. Verás, si crees que puedes vivir más tiempo, puedes vivir más tiempo. Es así de simple. Tú creas tu realidad a través de tus creencias. Solo necesitas creer que es posible, y crearás las circunstancias que respalden esa creencia, y experimentarás una vida más larga. Ahora bien, tal vez parezca que lo hemos simplificado demasiado al decir que solo se trata de sostener una creencia. Pero eso no es una simplificación en absoluto. Lo difícil es cambiar la creencia. Pero una vez que logras alterar esa creencia —una vez que realmente lo crees— entonces modificarás la realidad para que respalde esa nueva creencia.

Dentro de este nivel vibratorio, en este momento, sostienes la creencia de que vivir más allá de los cien años es un logro muy difícil. Y aunque digas lo contrario, sugerimos que, en lo profundo de ti, mantener la creencia de que es posible vivir doscientos años resulta muy difícil, difícil al punto de convertirla en una certeza absoluta. Sin embargo, una vez que lo hagas —una vez que realmente sostengas esa creencia como una verdad absoluta— comenzarás a crear la realidad que respalde esa creencia. Y al entrar en esta nueva era y en esta nueva energía, hay quienes ya están empezando a sostener esa creencia: que una vida más larga es, de algún modo, un atributo deseable. No quieren morir. Bueno, en realidad no mueres, así que en ese sentido no importa. Pero, desde el punto de vista de tu conciencia, parece más deseable vivir más tiempo, extender la vida. Y esa posibilidad, sin duda, existe. Y a medida que más entidades que ingresan en esta nueva era comiencen a sostener esa creencia, se generará una sincronía. Y, ciertamente, comenzarás a extender tus años de vida para respaldar ese sistema de creencias. Así que, todas esas posibilidades existen, sin duda.

Pero verás, lo importante aquí no es que vayas a vivir una vida más larga. Ciertamente no. El concepto verdaderamente importante de comprender es que, al alterar tu sistema de creencias, tienes la capacidad de alterar tu realidad. Eso es lo importante. Eso es lo que deberías integrar en tu entendimiento. Ese es el sistema de creencias que más te beneficiaría sostener: tú eres el creador de tu realidad.

Así que, muchas veces te sugerimos que hay tres sistemas de creencias simples que sostienes.

  • 1. El primero: tú eres quien crea tu realidad. Acepta la responsabilidad por tu realidad, y tendrás la oportunidad de cambiarla.
  • 2. El segundo: tú eres una Parte de Dios. El Dios que buscas existe dentro de ti, no estás separado. Tú eres una expresión de lo divino.
  • 3. El tercero: no puedes fallar. No puedes fallar en regresar al nivel vibratorio del que viniste. No hay ninguna prueba que debas pasar para ascender. No puedes fallar.
Tú eres una entidad que es una Parte del Uno, que existe dentro de este nivel vibratorio que creas a través de tus elecciones y tus sistemas de creencias, y tienes dentro de ti la capacidad de elegir regresar a ese nivel vibratorio del cual procedes. Esos son los tres sistemas de creencias que sugerimos que sería beneficioso que mantuvieras. Todos los demás puedes modificarlos si lo deseas, o reforzarlos si lo prefieres, dependiendo de la realidad que estés experimentando y de qué tanto te guste esa realidad.

Ahora, algunos de ustedes pueden tener preguntas para nosotros, así que haremos una pausa por unos momentos para permitirles organizarlas. Una vez más, les recordamos que durante nuestra intermisión, la energía y las entidades que están presentes en este espacio sagrado no se van. Y si eligen expresar la intención, esa interacción silenciosa, esa comunicación telepática, ciertamente continuará, y estaríamos profundamente agradecidos por esa oportunidad. Ahora, haremos una breve pausa y regresaremos para intentar responder cualquier pregunta que puedan tener en ese momento. Y así, los dejamos, con amor y con paz.