Una guía de conceptos
Personalidad mágica
Cuando el Yo Superior es invocado de manera adecuada y eficaz con el propósito de un trabajo, se le llama la personalidad mágica. Con esta invocación, se crea un puente entre espacio/tiempo y tiempo/espacio. En consecuencia, el Yo Superior experimenta directamente el catalizador de tercera densidad durante la duración del trabajo; y el yo de tercera densidad asume algo así como un ropaje, una conciencia que otorga percepción y poder mágicos.
El deseo, la voluntad y la polaridad son claves al trabajar con la personalidad mágica. En el desarrollo del ser hacia el uso de la personalidad mágica, se aconseja al buscador prestar atención a las cualidades de poder, amor y sabiduría, de modo que el buscador, equilibrado en el centro del amor y la sabiduría, busque el poder con el fin de servir a los demás.
En el curso de un trabajo mágico, la primera invocación es la de la personalidad mágica. Esta se atrae a través del portal desde el centro de energía violeta. Se hace gran énfasis en la correcta liberación de la personalidad mágica al concluir todos los trabajos.
Nota del Autor: Ser el Yo Superior
Mientras la personalidad mágica está activada, otorga la capacidad de realizar, como su nombre lo sugiere, un trabajo mágico: trabajar directamente con la energía inteligente solo a través de la conciencia (aunque acompañado de ritual e invocación).
Puede compararse con ponerse la toga de un juez. Mientras se lleva la toga, el ser actúa de acuerdo con estándares y responsabilidades más elevados, ejerciendo poderes que existen únicamente mientras se lleva puesta la toga. Para regresar a la vida normal, el ser debe renunciar a la toga y, con ella, a los poderes que pudo ejercer mientras vestía el ropaje.
Durante la limitada duración del trabajo, el yo encarnado, estando dentro de la tercera densidad, adquiere una parte de la capacidad del Yo Superior.