1 de Diciembre de 2002

▶ Escuchar

Antes que nada, permítannos expresar nuestros saludos a cada uno de ustedes y expresarles nuestra gratitud por ofrecernos una vez más esta oportunidad de entrar y de interactuar con cada uno de ustedes en su realidad y en su nivel vibracional.

Ahora, como es nuestra costumbre, les pediríamos, si así lo eligen, que expresen la intención de permitir un mayor adelgazamiento del velo. Permitir que otras entidades que estarían con nosotros esta tarde tengan también la oportunidad de entrar en su nivel vibracional y de ingresar en este espacio sagrado que ustedes han creado, y de tener la oportunidad de interactuar con cada uno de ustedes, si así lo eligen. Ahora, también pediríamos, como es nuestra costumbre, un momento de silencio. Y usamos ese momento para ajustar la energía que ustedes han traído a este espacio sagrado y permitir la reunión de esas otras entidades, afinando nuestra conexión con nuestro amigo Elías (el canal). Y así, si nos permiten ese momento, seremos breves.

Bien, les agradecemos por ese momento y, una vez más, expresamos nuestra gratitud por permitirnos esta oportunidad, por crear estas oportunidades únicas para que interactuemos con cada uno de ustedes. Pues en verdad es una experiencia placentera para nosotros y una que esperamos con entusiasmo. Porque venimos no solo a compartir información con ustedes, sino también a aprender de cada uno de ustedes.

Las entidades que están con nosotros esta tarde también darían la bienvenida a esa oportunidad de interactuar con cada uno de ustedes, de compartir información con ustedes y de ayudarles a traer a su conciencia las respuestas a las preguntas que tienen. Y muchas veces, la información que reciben a través de las interacciones con esas entidades es mucho más pertinente y mucho más precisa que la información que expresamos por medio de este amigo nuestro y a través de este uso algo limitado del vocabulario.

Porque, verán, interactuamos mediante un proceso de pensamientos, a través de una interacción por medio de la transmisión de sentimientos, y ese pensamiento y sentimiento es luego transmitido a su vocabulario. Y existen limitaciones en esa transferencia y en esa comunicación. Sin embargo, para ustedes existe la oportunidad de interactuar en lo que llamamos la comunicación silenciosa, de tener un intercambio telepático de información con aquellas entidades que están con nosotros esta tarde. La elección es suya. Como siempre, la elección es suya. Nunca sugerimos que deban hacer algo, sino que siempre sugerimos que tienen la opción de hacerlo. Y la elección de involucrarse en esa comunicación silenciosa existe, y es su elección. Y si lo eligen, descubrirán que es bastante fácil para ustedes alterar su conciencia, tener un ligero cambio en su conciencia y experimentar esa interacción con otras entidades que están con nosotros esta tarde. Y les aseguramos que, aunque puedan sentir que de alguna manera se han perdido la información que les estamos sugiriendo, les aseguramos que no se pierden de nada, sino que esa información también será recibida.

Y les aseguramos que esa interacción puede, si así lo eligen, tener un profundo impacto en su capacidad de crear su realidad conscientemente. La información puede llegarles en momentos en que sea más oportuno para traer a su conciencia la comprensión de sus creencias, que son el aspecto responsable de su proceso de creación de la realidad; y traer a su conciencia una comprensión, incluso si es una comprensión breve que parece que no logran asir, pero aun así, una comprensión, una sugerencia intuitiva, si lo desean, de cómo crean su realidad, de qué elecciones tomar, de qué creencias están teniendo influencia y cómo cambiar esas creencias. Toda esa información existe dentro de cada uno de ustedes. Las entidades que están con nosotros esta tarde no necesariamente les dan información que ustedes no tengan dentro de sí mismos, sino que más bien les ayudan a traerla a su conciencia. Así que la elección es suya. Si eligen más bien escuchar nuestro mensaje en lugar de involucrarse en esa comunicación silenciosa, también está bien. Realmente no nos importa. Verán, nosotros no juzgamos lo que hacen. Lo que hacen es su elección. Es su creación. Venimos porque ustedes expresan la intención. No venimos a decirles lo que deben hacer.

Y así, antes de que podamos comenzar esta tarde, quisiéramos darles a algunos de nuestros invitados recién —aparentemente recién— llegados, algo de información sobre quiénes somos, qué somos y por qué estamos aquí. Y luego, información sobre quiénes y qué son ustedes, y por qué están aquí.

Les damos el nombre de Joshiah. Y ese es un nombre que fue elegido por nuestro grupo inicial, si lo desean, con el que interactuamos cuando comenzamos estas transferencias en su marco de tiempo lineal en este período encarnacional. Hace ya más de dos años de su tiempo lineal. Ese grupo en particular eligió el nombre Joshiah, y nosotros habríamos usado cualquier nombre que se hubiera elegido. Realmente no importaba. Verán, les damos ese nombre simplemente para su conveniencia, para que puedan identificar quiénes somos.

Verán, dentro de su estado consciente, todavía desean y requieren tener algún tipo de identificación en forma de vocabulario. Y continúan nombrando a los individuos para darles algún tipo de expresión que puedan usar cuando deseen referirse a ese individuo. Y así nos han dado el nombre de Joshiah, y eso está bien.

Somos una personalidad multidimensional. En nuestro nivel vibracional no tenemos esas limitaciones, si lo desean, que existen dentro de su conciencia, por su elección, de tener el requerimiento de algún tipo de identificación. Verán, nosotros nos reconocemos unos a otros por nuestras personalidades, si lo desean, por nuestro proceso de pensamiento, por nuestros sentimientos. Entendemos y reconocemos a cada individuo.

Y así, somos una chispa de conciencia, si lo desean. Somos una personalidad multidimensional. Y tenemos y comprendemos el proceso de creación de la realidad. Tenemos la capacidad de crear nuestra propia realidad, y lo hacemos. Y comprendemos cómo creamos esa realidad. La creamos desde una posición de amor. Verán, la única manera posible de tener cualquier creación es desde una posición de amor. Y creamos nuestra realidad sin las limitaciones de lo que llamamos el velo que existe en su nivel vibracional.

Nuestro nivel vibracional —nuestro plano de existencia, si lo desean— está, en cierto sentido, muy alejado de su existencia y, sin embargo, existimos dentro del mismo espacio en el que ustedes existen. Porque, verán, el espacio y el tiempo son una ilusión. Son sus ilusiones mientras están en su estado consciente en este nivel vibracional. Y así, no estamos separados por el tiempo o el espacio, sino más bien por un tipo de energía electromagnética que llamaríamos, a falta de un término mejor, un nivel vibracional. Y ese nivel vibracional, en términos de vibraciones, si lo desean, en términos de energía, está algo apartado del que ustedes existen.

Venimos a ustedes porque los individuos de este grupo en particular expresaron la intención. Y agradecemos la oportunidad de interactuar, de compartir y, en efecto, de aprender de cada uno de ustedes.

Ahora, lo que *“no somos”* es: no somos ningún tipo de líder. Absolutamente no. No venimos a presentarnos como algún tipo de gurú. No les damos información diciendo: “Debes hacer esto y debes hacer aquello.” Absolutamente no. Muchas veces hacemos sugerencias. Ofrecemos información que ustedes desean. Información que existe dentro de su nivel vibracional y en lo que ustedes llaman su subconsciente.

No somos una entidad que haya existido dentro de su nivel vibracional. No hemos, en otras palabras, experimentado las encarnaciones y las limitaciones de la existencia física que ustedes han elegido experimentar. Nunca hemos experimentado una existencia física en su nivel vibracional.

Como individuos, han elegido crear este nivel vibracional y han establecido lo que llamamos un velo. Y es un tipo de energía electromagnética, si lo desean, que existe en cada célula y en cada átomo de todo su universo y de todo su ser físico, absolutamente, que limita la interacción o interferencia de otras entidades que existen fuera de su nivel vibracional. Y así, en primer lugar, no podríamos interferir en su nivel vibracional porque ustedes han establecido ese tipo de energía electromagnética que restringe e inhibe la interferencia; y en segundo lugar, no tenemos absolutamente ningún deseo de interferir en su realidad. No tenemos absolutamente ningún deseo de intentar crear por ustedes ni de tener ningún tipo de influencia sobre su creación que ustedes no deseen. No tenemos ningún deseo de interferir de ninguna manera.

Tampoco tenemos acceso a ningún conocimiento que exista dentro de su nivel vibracional al que ustedes no tengan acceso. Verán, es bastante absurdo creer que alguien que existe fuera de su nivel vibracional de alguna manera tenga acceso o comprensión de su nivel vibracional a la que ustedes no tengan acceso. Es su nivel vibracional. Ustedes lo crean y crean esta realidad. Ustedes entienden los mecanismos de funcionamiento de este proceso de creación. Ustedes entienden su nivel vibracional mejor que cualquier otra entidad existente fuera de su nivel vibracional. Y si creen que existen algunas entidades que tienen la capacidad de expresarles información o conocimiento al que ustedes no tienen acceso, eso simplemente no es una explicación precisa de su proceso de creación de la realidad. Absolutamente no.

Verán, les daríamos una analogía y les pediríamos que comprendan que las analogías son, en el mejor de los casos, limitadas, porque dejan ideas y conceptos abiertos a interpretación y muchas veces esa interpretación no es un reflejo preciso del concepto u idea original que se intentó expresar mediante la analogía. Pero aun así, les daríamos una analogía para sugerir que ustedes existen en un continente al que llaman el continente de Norteamérica. Ahora bien, pueden haber existido en este continente durante todo su período encarnacional y, sin embargo, por supuesto, hay otros continentes. También entienden que existen otras formas de vida en su Tierra que están en otros continentes, en otras sociedades. Y sería absurdo creer que alguien que ha existido en su continente pueda darles una descripción precisa de la sociedad que existe en otro continente con el que nunca ha tenido experiencia. Ustedes, por ejemplo, pueden nunca haber salido de este continente y nunca haber estado en el continente al que llaman Asia, y aun así muchos individuos pueden creer que tienen una muy buena comprensión de la sociedad que existe en Asia.

Y puede que la tengan. Pueden haber leído sobre ello. Pueden haber recibido todo tipo de información al respecto. Pero creer que comprenden esa sociedad mejor que los individuos que existen en el continente de Asia simplemente no sería correcto. Y, de manera similar, creer que existe una entidad fuera de su nivel vibracional que tenga un mayor entendimiento de su nivel vibracional que los individuos que existen dentro de su nivel vibracional simplemente no es así. Simplemente no existe.

Y así, no somos una entidad que tenga acceso a ninguna información sobre la realidad en la que ustedes existen que no esté disponible para cada uno de ustedes. De hecho, existe un concepto bastante interesante: muchas veces accedemos a su subconsciente y les reflejamos aquella información que ya está contenida en cada uno de ustedes. Y ese no es un proceso difícil. Cada uno de ustedes también tiene esa capacidad; simplemente se esconden de esa comprensión, de ese conocimiento y de esa habilidad. Pero, aun así, pueden hacerlo, y de hecho lo hacen muchas veces de manera regular, solo que no lo reconocen. Por lo tanto, no somos una entidad que tenga acceso a información a la que ustedes no tengan acceso.

Ahora bien, ¿quiénes son ustedes y por qué están en este nivel vibracional? Bueno, en primer lugar, ustedes son una chispa de conciencia. Y lo hemos dicho muchas veces y cada uno de ustedes ya lo ha escuchado antes: hemos sugerido que son una Parte de Dios, si lo desean. Son una Parte del Uno. Ahora bien, el uso de ese vocabulario pone limitaciones, porque sugiere que existe una Parte mayor del Uno o un Dios más grande, y eso simplemente no es así. Una Parte es una Parte. Aquí no hay distinción de tamaño. No estamos sugiriendo algo menor o mayor, sino una Parte igual. Y todas las chispas de conciencia que tienen la capacidad de crear en toda la creación son iguales. No hay una mayor ni una menor. Así que, una vez más, esa expresión de que ustedes son una Parte del Uno no es del todo precisa, porque ustedes son el Uno. Iguales a—ni más ni menos que—cualquier otro que exista en toda la creación.

Ustedes, como individuos y como conciencia humana, eligieron crear este nivel vibracional. Eligieron estar aquí. No vinieron porque creyeran que había algún crecimiento necesario. No vinieron porque pensaran: “Bueno, soy un individuo inferior o una parte de la conciencia que de algún modo debe aprender lecciones antes de poder trascender”. Absolutamente no. Vinieron aquí por elección. Vinieron sin creer, ni por un instante, que fueran menos ni más que cualquier otro individuo que exista en toda la creación. Vinieron aquí y crearon esta realidad, crearon este nivel vibracional, por elección.

Y lo hicieron por una razón aparentemente simple. Y, una vez más, no fue para aprender con el fin de trascender. No fue porque sintieran que había ciertas lecciones que debían cumplirse. Absolutamente no. Vinieron aquí porque desearon experimentar una multitud de sentimientos intensos que no son posibles en otros niveles vibracionales. Y cuando crearon este nivel vibracional y establecieron ese campo electromagnético —ese velo al que nos referimos—, lo establecieron con el propósito de permitirles crear una realidad de la cual no tenían conocimiento del propósito ni conocimiento del proceso de creación, de modo que pudieran experimentar los sentimientos y creer que eran reales. Y ven, precisamente porque creen que esta realidad es real, los sentimientos se vuelven mucho, mucho más intensos.

Hemos usado una analogía —y como siempre, una vez más, las analogías son pobres en el mejor de los casos—, pero hemos usado la analogía de un niño entrando en una sala de cine y quedando absolutamente y completamente fascinado con lo que ve, siendo influenciado hasta el punto de creer que lo que se está proyectando en la pantalla y lo que está escuchando y percibiendo es absolutamente cierto. Es real. Y debido a esa creencia puede invocar todo tipo de sentimientos respecto a esa presentación en particular, respecto a esa película, si se quiere, que está viendo en la pantalla. Y no entiende el proceso de creación y desarrollo de esa película, y cree que es real.

Ahora bien, a medida que crece —y aquí, una vez más, aparece la limitación de una analogía, porque ustedes no necesariamente tienen que crecer—, pero después, conforme un niño en un período encarnacional crece y se familiariza más con el proceso de creación de esa película, comienza a entender que no es real. Comienza a comprender, en efecto, que es un truco; que es un truco de la cámara; que es un truco de la promoción; que es un truco del productor y de los encargados de los efectos especiales que crean la ilusión que están observando en la pantalla. Y aunque esa ilusión todavía puede invocar sentimientos, esos sentimientos ya no son tan intensos.

Y cuando el individuo sale de la sala de cine, de repente los sentimientos ya no son ni de cerca tan intensos, porque entiende el proceso de creación de esa película. Y una vez que lo comprende, entonces se vuelve más difícil tener esos sentimientos tan intensos.

Ahora, de manera similar, cuando existes en un nivel vibracional en el que entiendes el proceso de creación de la realidad, cuando entiendes que todo es tu creación y que está basado en tus creencias, en tus elecciones y en lo que deseas, entonces también comprendes que es una ilusión y que puedes cambiarla. Y cuando entiendes eso, la intensidad de los sentimientos ya no es tan fuerte como lo es cuando crees que no es tu creación.

Y así, cuando existes dentro de este nivel vibracional y estás en tu estado consciente y colocas ese velo, ese tipo de sistema electromagnético, por elección limitas tu comprensión del proceso de creación de la realidad. Y, de manera similar al niño que mira la película sin entender el proceso de creación y desarrollo de esa película, tienes la oportunidad de experimentar sentimientos intensos. Sentimientos que no pueden ser duplicados en el resto de la creación. Y esa es la razón por la que elegiste crear esta realidad: para la oportunidad de experimentar esos sentimientos intensos. Y esa es la razón por la que damos la bienvenida a la oportunidad de interactuar contigo, porque nos da la oportunidad de experimentar esos sentimientos intensos.

Ahora bien, no es que nosotros no creemos realidades ilusorias también; de hecho, nuestras realidades son mucho más reales que tu realidad. Pero no es que no podamos crear esa realidad, y no es que no lo hagamos, sino que entendemos el proceso de creación de la realidad, y la intensidad de los sentimientos que experimentamos son sentimientos más relacionados con el amor y el amor a uno mismo. Y es el deseo de experimentar otros sentimientos lo que ha sido el propósito de tu creación de este nivel vibracional en el que existes. Porque, ves, tú también eres una personalidad multidimensional, al igual que nosotros. Tú también eres una chispa de conciencia. Y tú también creas tu realidad. Absolutamente.

Ahora bien, esta realidad que experimentas en el estado consciente es una realidad ilusoria. Es una ilusión. Ahora, eso no quiere decir ni por un instante que no sea importante y que debas simplemente dejarla de lado. Absolutamente no. Y no estamos sugiriendo que debas enfocarte más en lo que llamarías los aspectos espirituales o metafísicos de tu realidad. Absolutamente no. Sino más bien, comprender que lo que crees que es real solo es real porque tú crees que lo es. Es una ilusión. Y entender que es una ilusión hace que sea más fácil para ti alterar esa realidad, alterar una ilusión.

Verás, cuando miras la película y entiendes que es una ilusión, también comprendes que el productor puede cambiar esa ilusión para reflejar lo que desee mostrar en la pantalla. Ellos entienden, al igual que tú, que es una ilusión y que pueden cambiarla, pueden hacer que sea lo que quieran. Pues bien, irónicamente, la realidad que experimentas en tu estado consciente es tan ilusoria como esa proyección que ves en la pantalla. Y la cambias y puedes alterarla. Ahora, la ironía es que de hecho la cambias y la alteras constantemente, solo que no eres consciente del proceso.

Ahora bien, estás en las etapas de transformación hacia lo que nosotros llamamos la nueva era y la nueva energía. Y cuando esa transformación esté completa, existirá dentro de tu nivel vibracional—según tu elección—la posibilidad de comprender el proceso de creación de la realidad de manera consciente y de alterar conscientemente tu realidad, de crear conscientemente lo que desees.

Verás, tú sí afectas conscientemente tu realidad, solo que no lo crees. Simplemente no lo comprendes a nivel consciente. Cuando te sugerimos que es posible alterar tu realidad ilusoria, no solo es posible que lo hagas, sino que de hecho lo haces constantemente. Solo que no lo reconoces. Tú creas esta realidad y lo haces en base a tus creencias y en base a tus elecciones.

Ahora bien, si deseas creer que existe alguna entidad fuera de tu nivel vibracional que crea la realidad por ti, entonces también puedes crear esa realidad. Es tu elección. Es tu elección. Creas tu realidad basándote en tus decisiones y elecciones. Es un reflejo de tus sistemas de creencias y trae a tu estado consciente aquello que deseas. Y si tu deseo es no aceptar la responsabilidad, bueno, esa también es una elección y puedes crearla. Si crees que no eres responsable, está bien. También puedes crear esa realidad.

Verás, creas la realidad basándote en tus sistemas de creencias y no existe absolutamente ningún juicio sobre lo que está bien o mal, más allá del juicio que sostienes en tu estado consciente. Esa parte del Uno que eres, ese ser superior si lo prefieres, esa subconsciencia, esa chispa de creación consciente que eres, esa personalidad multidimensional que eres, no juzga lo que deseas traer a tu realidad, sino que—de una manera absolutamente amorosa—crea lo que desees en función de tus creencias, de tus elecciones, de lo que deseas, y de lo que surge de la amplitud de tu imaginación.

Esa Parte del Uno que eres—que es inseparable de ti, que existe dentro de cada célula física de todo tu ser—crea lo que sea que desees. Y si deseas no experimentar la responsabilidad de esa creación, no hay juicio en ello. Esa chispa de conciencia que eres lo crea. La ironía es que podrías crear lo que desees y podrías crearlo con la misma facilidad con que creas aquello que estás experimentando.

Ahora bien, no estamos sugiriendo que no estés experimentando una realidad que deseas, en absoluto. Puede que tengas una realidad absolutamente hermosa que no deseas cambiar en lo más mínimo, y puede que no la cambies. Pero a medida que tomes conciencia del proceso de creación consciente, a medida que empieces a comprender quién y qué eres en verdad—como te hemos sugerido tantas veces—tu percepción de tu realidad tiene una clara posibilidad de cambiar.

Verás, usando nuevamente nuestra analogía del cine, una vez que comprendes el proceso de creación de la realidad, la película ya no tiene el mismo impacto. Puedes ir, sentarte y ver la película, y experimentar las emociones, pero, una vez más, cuando sales de esa película, de ese estudio, ya no es lo mismo que cuando no entendías que no era real. Y así sucede cuando comienzas a captar el proceso de creación de la realidad—cuando realmente haces tuyo el concepto de que creas tu realidad y que puedes crear lo que desees—no es que necesariamente vayas a cambiar tu realidad por completo, pero ciertamente puedes cambiar tu percepción de ella. Y aquello que antes creías tan importante y tan real, de repente puede dejar de tener esa influencia sobre ti.

Ahora bien, hay otro concepto que va de la mano con esa comprensión del proceso de creación de la realidad, y es que una vez que has tomado la decisión y comienzas a sostener la creencia de que creas tu realidad, y una vez que comienzas a demostrártelo a ti mismo—demostrárselo a tu yo consciente—ya no puedes retroceder. No puedes volver a ese punto en el que no comprendías que eres responsable de tu realidad. No puedes regresar.

Verás, es como un individuo—una vez más, usando nuestra analogía—que comprende el proceso de creación de esa película que está viendo en la pantalla. Una vez que comprende el proceso, esa película nunca podrá tener el mismo impacto. No es que no pueda ser agradable y no es que no pueda ser entretenida. Absolutamente no. Pero nunca podrás volver a esa posición de creer que es real. No puedes retroceder. Y cuando, en tu estado consciente, estás creando tu realidad y comprendes ese concepto del proceso de creación de la realidad, cuando comprendes quién y qué eres en verdad, no puedes retroceder. No puedes desecharlo.

Y si intentas retroceder, si intentas desecharlo, existe una posibilidad muy fuerte de que experimentes enfermedad e incomodidad en tu existencia consciente. Pues no puedes engañarte de esa manera. No puedes mentirte de esa manera. Porque, verás, cuando comienzas a comprender el concepto de este proceso de creación de la realidad y quién y qué eres en verdad, también comienzas a amarte más. Comienzas a amar a ese ser que eres. Y al intentar retroceder, estás intentando negar ese amor (inaudible), ese amor propio. Y cuando intentas negar ese amor propio, generas incomodidad para ti mismo. No puedes retroceder. No puedes revertir esa comprensión.

Ahora bien, no estamos sugiriendo que eso sea algo bueno o malo. Absolutamente no. Pues, una vez más, nosotros no juzgamos. El juicio existe dentro de su conciencia, dentro de su nivel vibracional. No existen entidades fuera de su nivel vibracional que juzguen lo que hacen. Ustedes son honrados por lo que hacen. Están, una vez más, en lo que llamamos la vanguardia del proceso de creación. Absolutamente en ninguna parte, en toda la creación y en todos los demás niveles vibracionales, existe una duplicación del nivel vibracional que ustedes han elegido crear y en el que han elegido existir. Es único.

Ustedes son individuos únicos por elegir entrar en este nivel vibracional y son honrados por lo que hacen, no juzgados. No hay lecciones que deban aprender. No hay juicio sobre lo que crean—absolutamente ninguno—aparte del juicio que ustedes mismos se imponen en su estado consciente.

Y así, la realidad que ustedes crean, ya sea que elijan trasladarse a lo que llamamos esta nueva era y nueva energía o que elijan permanecer en la energía antigua, realmente no importa. Realmente no importa. No hay juicio, aparte del juicio que ustedes mismos se imponen.

Porque, ven, no pueden fracasar. Absolutamente no pueden fracasar en regresar a la comprensión de quiénes y qué son en verdad. Eso es un hecho. No tienen que seguir un conjunto específico de reglas para progresar. Absolutamente no. Siguen un conjunto de reglas para establecer un personaje, para comprender quiénes son mientras están en el estado consciente, de modo que puedan apreciarse a sí mismos. Por eso tienen lo que llaman una conciencia. Por eso establecen los principios por los cuales existir, para que mientras estén en el estado consciente puedan apreciar a ese individuo que han creado y experimentar amor y amor propio.

Por eso existe la culpa. No tiene absolutamente nada que ver con tu capacidad de entrar en lo que llamas cielo. No puedes fracasar. No hay ni un solo individuo en tu nivel vibracional que vaya a fracasar en regresar a la comprensión de quiénes y qué son. Absolutamente ninguno. No existen individuos perdidos. Simplemente no es posible. No puede suceder. Esa es tu elección. Esta es tu realidad. Eliges estar aquí. Eliges perpetuarla y eliges crearla. Y puedes, si lo deseas, terminarla. No hay juicio de ninguna manera. Es tu elección. Absolutamente. No puedes fracasar.

Ustedes, como individuos, creen en su estado consciente que existe un marco de tiempo lineal, y creen y establecen todo tipo de pruebas de que realmente hay un principio y un fin, y que de alguna manera se han transformado y evolucionado hacia los individuos que son en este período de encarnación particular.

Irónicamente, el tiempo es una ilusión. Ustedes existen en el ahora. Todos los períodos de encarnación son simultáneos. Ustedes son una personalidad multidimensional y tienen la capacidad de crear no solo su presente, sino también su pasado y su futuro. E irónicamente, no solo tienen la capacidad de crearlo, sino que lo crean, absolutamente. No solo tienen la capacidad de alterarlo, sino que lo alteran. Absolutamente. Simplemente no lo comprenden conscientemente.

Y así, cuando un individuo en su período de encarnación particular presenta un concepto como, “Oh, bueno, tienes esta evolución y hubo ciertas circunstancias que ocurrieron siglos atrás que nos han influido,” y ese concepto en particular es aceptado por lo que llamamos el concepto de conciencia humana, entonces crean la realidad para respaldar esa creencia. Y de repente comienzan a encontrar todos estos artefactos y todas estas pruebas.

¿Es real? Absolutamente. Es tan real como cualquier otra cosa que experimentes en esta realidad ilusoria que creas. Verás, todo es una ilusión. Todo es una ilusión y puedes cambiarlo y puedes crear lo que sea que creas. Y todo es una ilusión.

Los individuos que creen que existen espíritus malignos pueden crear las circunstancias para tener esa experiencia mientras están en su estado consciente. Absolutamente. Esa es tu elección. La única limitación del proceso de creación en este nivel vibracional es tu imaginación. Si puedes imaginarlo, si puedes creerlo; si puedes elegirlo, puedes crearlo. Absolutamente.

Y no hay juicio sobre lo que está bien o mal, aparte del juicio que ustedes mismos le asignen en su estado consciente. Y así, ese Pedazo del Uno que son, esa chispa de conciencia que son y que tiene la capacidad de crear, crea lo que deseen y en lo que crean—sin importar cuán extraña sea la creencia. Porque todo es una ilusión.

Ustedes tienen solo tres verdades, tres verdades que existen no solo en su nivel vibracional, sino en todos los niveles vibracionales a lo largo de toda la creación. Ustedes son la chispa de conciencia que es un Pedazo del Uno, si lo desean, un Pedazo de Dios, no mayor ni menor que cualquier otra chispa de conciencia a lo largo de toda la creación, y como esa chispa de conciencia crean su realidad. Ningún otro individuo—ya sea dentro o fuera de su nivel vibracional—excepto ustedes, crea su realidad. Absolutamente. Y no pueden fracasar. Absolutamente no pueden fracasar en regresar a la comprensión de quiénes y qué son. Eso es un hecho. Eso es una garantía.

Si pueden sostener esos tres conceptos y entender cómo interactúan entre sí, entonces pueden comenzar a vislumbrar cuán ilusoria es esta realidad, cómo cuando termina en términos de su período de encarnación consciente no mueren. No entran en algún pozo oscuro e imprevisto del que no puedan regresar. Absolutamente no. Más bien, desplazan su conciencia hasta el punto de comprender quiénes y qué son en verdad.

E incluso en ese estado en el que primero, lo que llaman, mueren, cuando finalizan por primera vez este período de encarnación, aún existen dentro de un velo; las creencias que sostienen pueden influir también en ese período particular de su proceso de creación de la realidad. Absolutamente. Porque, verán, el proceso de crear su realidad no se altera, sin importar el nivel vibracional en el que existan. Así que, si eligen creer que hay un Dios y desean tener esa experiencia, bien, pueden crearla. Absolutamente. Puede ser tan real como cualquier otra experiencia o creación que puedan tener.

Pero ustedes, en ese nivel de su conciencia, tienen una opción y elección mucho más sencilla, si lo desean, para alterar su consciencia aún más, y dar un paso atrás para comprender que crean su realidad. Para dar un paso atrás y entender que es una ilusión. Y pueden elegir continuar creando en este nivel vibracional, continuar operando con las limitaciones de ese velo, o dar un paso fuera de este nivel vibracional y entrar en otro nivel vibracional donde tendrán la comprensión consciente de quiénes y qué son y la comprensión consciente del proceso de creación de la realidad. La elección es suya, y no pueden—absolutamente—fallar.

Ahora, para aquellos de ustedes que han estado con nosotros muchas veces, no debería sorprender que normalmente volvamos a nuestro tema favorito, y ese son los tres sistemas de creencias. Porque esa es la clave. Esa es la comprensión de quiénes y qué son. Eso y desarrollar la capacidad de amarse a sí mismos para poder crear lo que deseen y hacerlo conscientemente. “Amarse a sí mismos” es la clave de este proceso de creación consciente. Y se vuelve mucho más fácil cuando realmente creen en esos tres conceptos.

Ahora, haríamos una pausa de uno o dos minutos y les recordamos que cuando hacemos nuestra pausa, las entidades que nos acompañan esta tarde y la energía que ustedes han creado dentro de este espacio sagrado no se van. Y si desean continuar con su comunicación silenciosa, eso es posible; solo deben expresar la intención. Además, les recordamos que no estamos separados por tiempo o espacio, sino por un nivel vibracional, y siempre estaremos con ustedes. La elección es suya.

Ahora, haremos una pausa de uno o dos minutos, y si lo desean, regresaremos, y si tienen preguntas, intentaremos responderlas. Así que los dejaremos por un momento o dos, con amor y con paz.