1 de Junio de 2003 QA

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Nuevamente, nos gustaría expresar nuestro agradecimiento por invitarnos de vuelta a su nivel vibratorio y a su realidad y por ofrecernos esta oportunidad de interactuar y compartir con cada uno de ustedes una vez más. Y les recordamos brevemente que la energía y las entidades que están con nosotros esta tarde permanecen dentro de este espacio sagrado que han creado, y si eligen involucrarse y participar en esa comunicación silenciosa, esa oportunidad permanece y existe para ustedes. Solo tienen que expresar la intención. La elección es suya.

Ahora bien, muchas veces cuando les expresamos información, estamos limitados por el uso de un vocabulario para dar descripciones precisas o una transferencia exacta de información, porque simplemente no existen términos en su vocabulario que permitan la transferencia completa de un pensamiento o de un sentimiento o de una emoción. Una transferencia —una transferencia precisa de un concepto—, por ejemplo, continuamente les decimos que ustedes son una parte del Uno, una chispa de conciencia, y esa parte del Uno infiere de algún modo que ustedes son un fragmento de algo más que parece ser mucho más grande o algo que comprende el todo y ustedes no son más que una porción de eso, y eso no es así. Cuando sugerimos que existen dentro de cada célula de su ser y dentro de cada átomo de todo su universo, una vez más se infiere que ustedes son una pieza de su universo, una parte de ese todo, si así lo desean. Y eso no es exacto. Porque, una vez más, no hay espacio. Es una ilusión.

La Parte del Uno, la chispa de conciencia a la que nos referimos, es igual a cada otra chispa de conciencia que existe dentro del llamado todo, dentro del Uno. No es que haya una porción mayor o menor. El espacio es una ilusión que ustedes experimentan en su estado consciente. No existe fuera de su estado consciente. Y cuando sugerimos que existen dentro de cada célula de su ser y dentro de cada átomo de todo su universo, da la ilusión, o quizá ofrece una perspectiva, de que ustedes son esa monstruosa entidad que existe a lo largo de todo su universo. Y lo son, pero irónicamente su universo entero es una ilusión. No hay espacio. No hay mayor ni menor. Mayor o menor son terminologías que reflejan su percepción del espacio. Y simplemente no existe.

Así que decir que ustedes son una Parte del Uno vuelve a inferir que hay un Uno del que ustedes son una porción, y eso no es exactamente una descripción precisa. Su universo entero es una ilusión y ustedes existen dentro de la ilusión en cada átomo de la ilusión. Y no es grande ni pequeño. Simplemente es. Existe en el ahora. El tiempo y el espacio son ilusiones que experimentan en su estado consciente. Y sin embargo, a través de esa creencia —esa creencia de la conciencia humana de que existe el espacio— viene consigo el concepto de que pueden ser grandes o pequeños. Y se vuelve un concepto difícil de entender y asimilar que pueden existir en cada átomo de su ilusión entera, en todo su universo, porque creen que el universo es casi inconcebiblemente grande, más allá de su imaginación más desbocada.

Incluso sus científicos más avanzados no pueden decirles cuán grande es el universo. Proponen ideas, pero luego, en el lapso de una generación de sus científicos, alteran esa primera creencia y proponen otra hipótesis sobre cuán grande es su universo. Y si es tan grande, ¿cómo pueden existir en cada átomo? Bueno, sólo es grande porque ustedes creen que lo es.

El espacio es una ilusión. Ustedes existen dentro de cada célula de toda la ilusión. Cuando comprenden que es una ilusión —una ilusión importante, pero ilusión al fin y al cabo— entonces les resulta más fácil entender que pueden existir en toda la ilusión y que pueden enfocar su conciencia en cualquier porción particular de la ilusión que deseen, porque su conciencia existe en toda la ilusión. Ustedes eligen colocar la creencia de que hay espacio y limitar su entendimiento consciente e interacción con su ilusión al ser físico en el que erróneamente creen existir. El ser físico con el que limitan su interacción mientras están en su estado consciente no es más ni menos creación suya que la ilusión entera.

Ustedes eligen, a través de sus creencias —a través de su conciencia humana, creencias sociales e individuales— reforzar un tipo de energía magnética que nosotros llamamos el velo, que restringe su comprensión de la ilusión y su interacción y creación de la ilusión, de modo que puedan experimentar lo que parece ser real mientras están en su estado consciente y mientras limitan su interacción en la ilusión a su ser físico.

Una vez más, hay quienes han desarrollado diversos métodos y técnicas para conectar con su conciencia en otras áreas de la ilusión y experimentar lo que ustedes llaman experiencias fuera del cuerpo. Esa capacidad existe en cada uno de ustedes porque, una vez más, es una ilusión. Y el uso de su vocabulario, que insinúa que ustedes son una parte de la ilusión, no es exacto, pues sugiere que existe un todo del que ustedes son apenas una parte y, sin embargo, paradójicamente, ustedes son el todo. No hay menos ni más, no hay mayor ni menor.

El espacio es una ilusión que experimentan en su estado consciente para dar validez a toda la ilusión que crean y que representa esta realidad que viven en su estado consciente. Y así, el uso del vocabulario tiene sus limitaciones a la hora de ofrecerles explicaciones precisas sobre lo que hacen para crear su realidad. Y da la ilusión de que, de algún modo, esta realidad es más grande de lo que ustedes son, que no son más que una pequeña parte de la realidad. Y ninguna de esas descripciones es exacta.

Ustedes son una Parte del Uno. Son una chispa de conciencia que tiene la capacidad de crear. No son ni mayores ni menores que ninguna otra chispa de conciencia que crea realidades. Y la realidad que crean es ilusoria. El tiempo y el espacio no existen excepto dentro de su sistema de creencias y mientras están en su estado consciente en esta realidad ilusoria. Ustedes existen en el ahora. Eligen ocultarse de esa comprensión, de esa realidad, si así lo desean, cuando están en su estado consciente en esta realidad.

Les hemos sugerido muchas veces que intenten llevar parte de su conciencia al estado de sueño para que puedan tanto manipular conscientemente ese estado onírico como también hacerse una idea de cómo sería traer los conceptos de ese proceso de creación desde el estado de sueño de vuelta al estado consciente, de modo que puedan comprender cuán ilusoria es esta realidad y puedan alterarla conscientemente al comprender de manera consciente cuáles son las creencias, y al entender que toda la realidad es ilusoria. No hay espacio y, por lo tanto, dado que el espacio es una ilusión que no existe, no es muy difícil entonces captar el concepto de que pueden existir en cada átomo de esta ilusión sin espacio que experimentan, y así, cuando estén en su estado consciente, entender el concepto de que todo lo que experimentan son ustedes, es una parte de su conciencia, si así lo desean. Y si desean experimentar esa conciencia en varias áreas de su creación, esa es su elección.

Una vez más, el uso del vocabulario distorsiona esa realidad actual, pues vuelve a dar la impresión de que existe un Uno del que ustedes son parte, y no es así. Ustedes son el Uno. No hay mayor ni menor.

Ahora bien, el ego, al que nos hemos referido en el pasado y como ustedes lo llaman, es una porción de esa llamada personalidad que ustedes son y que expresan mientras están en su estado consciente. Cada entidad que existe dentro de su nivel vibratorio tiene un ego. Absolutamente. No podrían existir sin él.

Ahora, ese ego al que se refieren es el resultado de su elección de erigir un velo que limita la interacción entre su consciencia y su subconsciente mientras están en su estado consciente. Y es en ese estado consciente cuando tienen un ego que actúa como su intermediario, si así lo desean, entre ese yo superior, ese subconsciente y la consciencia.

Ahora bien, ustedes existen en muchas encarnaciones, absolutamente, de forma simultánea. De nuevo, un concepto muy difícil de captar. Pero, no obstante, ustedes existen en el ahora y ello ocurre simultáneamente. Ustedes creen en un marco temporal lineal y establecen todo tipo de realidades para sostener esa creencia de que hay pasado, presente y futuro; sin embargo, todo existe en el ahora. Y las múltiples encarnaciones en las que están involucrados cada una tiene un ego, absolutamente. Cada una tiene la capacidad de interactuar en el estado consciente con otros individuos que participan en este proceso de creación de la realidad ilusoria. Y ese ego muchas veces es distinto en cada uno de los periodos de encarnación.

La Parte del Uno que ustedes son es constante. Es una personalidad multidimensional. Es mucho más de lo que pueden siquiera comenzar a comprender en su estado consciente. Y está compuesta por todo tipo de, una vez más, personalidades multidimensionales de diversos géneros. Y cada una de esas personalidades implicadas en cada uno de esos períodos de encarnación tiene un ego. Y ese ego, que es un reflejo de esa personalidad, difiere hasta el punto en que ni siquiera sería reconocible como perteneciente a la misma entidad del yo superior.

Ahora, cuando están en su estado de sueño el ego desaparece. Es una porción de su estado consciente. Cuando están en su estado de sueño y cuando están en un estado alterado de conciencia, a todos los efectos esta ilusión que experimentan en su estado consciente en este nivel vibratorio deja de existir y, en consecuencia, ese ego deja de existir. Es una ilusión.

La realidad, la conciencia que experimentan en esta realidad es una ilusión. Ustedes eligen limitar la interacción con el yo superior, con la Parte del Uno que son, con esa chispa de conciencia —sea la terminología que prefieran usar. Ustedes eligen limitar esa interacción erigiendo un velo cuando están en su estado consciente y ponen en marcha un ego que les permite funcionar, que interactúa con otras entidades en este nivel vibratorio. Un ego, de nuevo, que es reflejo de las creencias que sostienen, es reflejo del género que eligen asumir en este periodo de encarnación particular, es reflejo incluso de las características físicas que eligen crear y en las que participan en este periodo de encarnación. Y ese ego cambia con cada periodo de encarnación.

Ustedes son una personalidad multidimensional. En su estado consciente tienen una variedad de egos, una variedad de personalidades que les permiten experimentar una multitud de creaciones que les ofrece la oportunidad de sentir una gama muy amplia y variada de emociones. Cuando interactuamos con ustedes en ese estado alterado de conciencia, interactuamos con la personalidad multidimensional que son, con la Parte del Uno que son. Entendemos quiénes y qué somos. No necesitamos un ego, como ustedes dicen, para proyectar nuestra personalidad. Somos una personalidad multidimensional que existe en varias creaciones de las cuales somos responsables, que aceptamos la responsabilidad, creamos y comprendemos los métodos de nuestra creación, y no necesitamos ese ego porque no nos ocultamos a la comprensión de quiénes y qué somos en realidad. Y cuando interactuamos con ustedes en lo que llamamos esa comunicación silenciosa en sus estados alterados de conciencia, interactuamos con esa Parte del Uno que son, con esa chispa de conciencia que son, que deja de lado el ego y posee una comprensión completa de esta realidad ilusoria en la que existen.

Primero, les sugeriríamos que muchas de sus llamadas mitologías históricas se basan en algún tipo de lo que ustedes llamarían hecho. Ahora bien, esto plantea la pregunta: ¿qué es un hecho? Porque, una vez más, su realidad es una ilusión y pueden crear aquello que deseen.

Ustedes tienen, dentro de su presente período de encarnación, la creencia de que la fuerza de la gravedad no puede ser alterada. Perpetuamente diseñan, ingenian y construyen diversos aparatos que funcionan dentro de esa creencia de que no pueden alterar su fuerza de gravedad. Su fuerza de gravedad existe porque es lo que ustedes eligen creer. Es una ilusión. Los individuos del período atlante entendían que era una ilusión, entendían que creaban esta realidad a través de sus creencias, y comprendían que, debido a que era una ilusión, podían alterar una ilusión.

Pueden, mediante diversos métodos, alterar aquello que ustedes llaman la fuerza de la gravedad. Podrían hacer posible que un solo individuo levante lo que ahora, dentro de sus sistemas de creencias presentes, requeriría a una multitud de hombres, simplemente eliminando la fuerza de la gravedad.

Ahora bien, ¿es eso posible? ¿Qué creen ustedes? Porque, una vez más, la creencia precede a la realidad. Los individuos, nuevamente, en el período atlante entendían que la realidad es una ilusión. Esa es la clave: comprender que la realidad es una ilusión. No hay solo algunas cosas en su realidad que puedan alterar, sino que pueden alterar todas. Esta es su creación y es una creación ilusoria.

Y así, ¿es posible que exista un aparato, si lo desean, al que ustedes llaman el Arca de la Alianza, que tenga la capacidad de contener en su interior una fuente ilimitada de energía? Absolutamente. Cada uno de ustedes contiene en su interior una fuente ilimitada de energía. La clave es entender que poseen esa energía.

Ahora bien, si creen —y muchos creen que según su llamada historia— que debió haber existido algún tipo de aparato que contenía esa energía particular, entonces, efectivamente, podrían crear esa realidad para sostener la creencia. Y si creen que la única manera de crear tal aparato era mediante el uso de lo que ahora entienden como tecnología para fabricar un condensador que pudiera contener un tipo de energía eléctrica o magnética, entonces, efectivamente, a través de ese sistema de creencias pueden crear esa realidad.

El pasado puede alterarse con tanta facilidad como su futuro y su presente. Y cuando ustedes mantienen, dentro de este periodo de encarnación, la creencia de que debe haber existido algún tipo de aparato que era realmente muy engorroso, muy pesado —porque la única manera en que podrían crear tal aparato según su entendimiento presente es que debía contener en su interior componentes hechos de varios elementos muy pesados y muy difíciles de transportar—, y si ese es el caso, ¿cómo en la Tierra pudieron tan pocos hombres cargar con ellos?

Entiendan, una vez más, que ustedes crean su pasado así como su presente y su futuro, y las creencias que sostienen influyen en los descubrimientos que realizan en su presente, los cuales son un reflejo de su pasado. No son cosas separadas. Mientras las entidades que existen en este periodo de encarnación crean que es muy difícil aprovechar ciertos elementos de energía y que la única manera de hacerlo es mediante tecnología muy engorrosa, entonces crearán la realidad para sostener esa creencia. Mientras los individuos en este periodo de encarnación crean que deben tratar la gravedad con lo que podrían llamar métodos y maneras convencionales, entonces crearán realidades que apoyen esa creencia —incluso realidades que están en su pasado.

Es interesante que existan, en su llamado pasado, diversos elementos que parecen explicables y que, sin embargo, ustedes mismos crearon, pero eligen no sostener la creencia —en este período de encarnación en particular— de que tienen la capacidad o la habilidad para realizar ese tipo de creaciones, como el Arca de la Alianza, como la creación de lo que ustedes llaman las grandes pirámides, y muchas otras estructuras que existen a lo largo de sus sistemas terrestres y que fueron hechas por lo que sus científicos de hoy llamarían entidades primitivas.

Sin embargo, pese a todo el entendimiento científico, incluso en su llamada tecnología moderna, no tienen la capacidad de recrear lo que ustedes crearon en su pasado. Lo que ustedes crearon en su pasado. No se trata de algunas entidades que existieron en su pasado y luego desaparecieron repentinamente. Son las mismas entidades que existen en su sistema terrestre en su llamado presente. Las mismas entidades que poseen ese conocimiento en este período de encarnación, pero que eligen, mediante su sistema de creencias y mediante la construcción y mantenimiento del velo, limitar esa comprensión.

Todo su nivel vibratorio es una ilusión. Si desean creer que es necesario tener un determinado tipo de aparato para aprovechar la energía, entonces pueden mantener esa creencia. Los individuos del período atlante tenían otras técnicas que usaban varios tipos de electricidad y magnetismo para alterar la energía que ellos empleaban y que ustedes emplean en este periodo de encarnación para crear esta realidad ilusoria. Y utilizaron esa energía para, por así decirlo, anular los efectos de su gravedad.

Entendían que era posible proyectarse a diversas áreas de su sistema terrestre usando la energía que existe dentro de cada átomo de todo el universo para lograr esa hazaña. Y así, la energía está siempre con ellos. No era una energía similar a la que ustedes usan en este periodo de encarnación, en la que deben almacenarla o transportarla —una energía que ustedes creen que sólo puede provenir del sol.

Surge entonces la pregunta: “¿Quién crea el sol?” Y si tienen la capacidad de crear el sol, entonces seguramente tienen la capacidad de conectarse con la misma energía que usan para crear todo su universo, todo su nivel vibratorio. Y tienen la capacidad de alterar cosas aparentemente sencillas como la gravedad, que tienen un efecto tan tremendo sobre todo su universo y sobre su funcionamiento dentro de él.

Sugerimos que, en efecto, hay entidades que existen en este periodo de encarnación que, en otras áreas de sus encarnaciones, no solo tuvieron acceso a ese conocimiento, sino que lo utilizaron con bastante facilidad para construir aquello que ahora parece incapaz de reproducir la tecnología moderna.

Una vez más, muchos de los sistemas de creencias dentro de su nivel vibratorio son muy difíciles de describir con precisión empleando cierto vocabulario, porque hay limitaciones en el lenguaje que intenta expresar diversos conceptos, ideas, emociones o sentimientos y se queda bastante corto. Y la propia terminología de ser infinito frente a finito, una vez más, da la impresión de que hay un comienzo y un fin, de que existe en efecto el concepto de tiempo y espacio, que son ilusiones.

Ahora bien, las personas intentan dar explicaciones basadas en esos conceptos de tiempo y espacio, y nosotros, al entregarles información muchas veces, hacemos lo mismo. Muchas veces nos referimos a su pasado cuando realmente no tienen un pasado; ustedes existen en el ahora. Pero, no obstante, para acomodarnos a sus sistemas de creencias y a sus entendimientos, y para operar dentro de las limitaciones de un vocabulario, usamos esa terminología e intentamos ofrecer esas explicaciones.

Cuando las personas intentan dar explicaciones dentro de vuestra conciencia, se vuelve aún más difícil, porque creen que existe el tiempo y el espacio, y por tanto sus definiciones se basan en esos conceptos de tiempo y espacio.

Ahora bien, afirmar que están jugando un juego y que pueden ser ya sea \[a] una porción finita o infinita de esa representación, o estar involucrados en ese juego, es, una vez más, sugerir que existe el tiempo. Y no es así. Ustedes existen en el ahora. Sugerir que alguien, usando esa terminología particular y aplicándola al concepto de que uno no puede ser una víctima o puede elegir no ser una víctima, vuelve a insinuar que hay una influencia fuera de las elecciones del individuo que está creando la realidad que experimenta. Simplemente no ocurre. Ustedes crean su realidad a través de sus sistemas de creencias.

Ahora bien, cuando un individuo elige ser una víctima, una vez más, hay muchas entidades que están bastante dispuestas a involucrarse en ese proceso de creación de la realidad y a acomodarlas tratándolas como víctimas. Y muchas veces los individuos tienen dificultad para alterar ese sistema de creencias porque ese sistema de creencias fue uno que eligieron traer a este periodo de encarnación, un sistema de creencias que aparentemente está más allá de su capacidad de alterar. Decimos “aparentemente” porque siempre pueden alterar sus sistemas de creencias. Esta realidad ilusoria en la que existen puede ser alterada. Absolutamente.

Ahora bien, cuando un individuo elige ser una víctima esto no es una decisión finita ni infinita. No se basa en el tiempo. No es un juego. Es un sistema de creencias que un individuo sostiene y que influye en sus elecciones y decisiones para crear la realidad que experimenta. La clave es alterar la creencia. No se sugiere por un instante que porque alteren la creencia y dejen de ser víctimas el agresor vaya a dejar de ser agresor de repente. El agresor puede simplemente cambiar. Pueden simplemente pasar a diferentes relaciones. Desean y creen que son menos dignos. Les falta amor propio, por así decirlo, y en un intento por demostrar que son dignos desean ser agresores y crean ese tipo de realidad para sostener las creencias que mantienen.

Cuando alteran sus creencias, alteran su realidad. Un individuo envuelto en cualquier tipo de proceso de creación de realidad puede alterar esa realidad. Esto no es un juego finito o infinito en el que estén involucrados. De ninguna manera. Ustedes existen en el ahora. Crean su realidad basándose en su creencia. Es una realidad ilusoria y pueden cambiarla.

Si usted u otro individuo implicado en su proceso de creación de la realidad participa en ese tipo de situación agresor/víctima, independientemente de en qué lado se encuentren, pueden cambiarla. Y, una vez más, la clave para cambiar es cambiar la creencia. Y muchas veces la clave para cambiar la creencia es experimentar conscientemente el amor propio. Empezar a creer conscientemente que cada uno de ustedes es una persona digna. Que cada uno de ustedes crea su realidad desde una posición de amor. Que son individuos que pueden amarse incondicionalmente. Que son una Parte Igual del Uno, ni más ni menos. Y que crean su realidad por completo. Y si desean alterarla, alteren la creencia. Y si desean dejar de ser agresor o víctima, aprendan a amarse más, conscientemente.

Ustedes ven, los individuos que carecen de ese sentimiento de merecimiento, los individuos que aparentemente carecen de dirección, los individuos que aparentemente sienten que son víctimas, solo mantienen ese síndrome de “pobre de mí” en el estado consciente. En el estado subconsciente comprenden absolutamente que son una Parte del Uno. En el estado subconsciente, en esa Parte del Uno que son, en esa chispa de conciencia que son, en sus estados alterados de conciencia cuando están en sus sueños, no son víctimas. No se sienten inferiores. No carecen de sentimientos de merecimiento y de confianza. Absolutamente no. Entienden que son una Parte Igual del Uno. Entienden que son una chispa de conciencia que crea la realidad que experimentan y que la única manera de crearla es desde una posición de amor absoluto, incondicional y completo. Y luego eligen mantener la creencia de que cuando regresen a su consciencia pretenderán que no se aman. Fingirán que no son dignos. Fingirán que no merecen. Crean la realidad para sostener la creencia que mantienen. Absolutamente.

Si desean dejar de ser víctimas o agresores, la clave es amarse a sí mismos. Ámense y comprendan que crean la realidad que experimentan desde una posición de amor. No es una realidad que haya sido impuesta o infligida a nadie. Es una realidad que proviene de elecciones y sistemas de creencias. Y es una realidad que crean completamente desde una posición de amor. Es una realidad ilusoria y pueden llevar ese amor dentro de la ilusión y pueden amarse a sí mismos.

Cuando se aman a sí mismos empiezan a experimentar esos sentimientos de confianza y merecimiento, y también comienzan a amar a los demás y los demás, a su vez, empiezan a amarlos. Y encontrarán que todo tipo de actividades diversas ocurren en su realidad que les traen las cosas que desean. Y aquellas entidades con las que tienen dificultades o dejan de involucrarse en esas actividades difíciles o eligen involucrarse en otras relaciones. Y ponen fin a ese sentimiento que proviene de la falta de amor propio, de la falta de merecimiento. Así que la elección es suya.

Esto no es un juego basado en acciones finitas o infinitas, sino que es una ilusión basada en sistemas de creencias. Y es su creación. La única manera de cambiarla es aceptar la responsabilidad por ella. Comprendan que la crean desde una posición de amor y comiencen a amarse conscientemente. Ámense por completo y conscientemente. Y si hay una parte de ustedes que les resulta difícil amar, ámenla de todos modos y cámbienla.

Puedes cambiar quién eres, absolutamente. Y cuando cambies quién eres, comenzarás a transmitir a los demás que te agradas a ti mismo. Comenzarás a mostrar a los demás que eres una persona merecedora, y ese amor y ese sentido de merecimiento te serán devueltos muchas veces.

Esa es la ironía, ¿ven?, porque es su elección estar en esta ilusión. Toda esta ilusión es su creación mediante su elección. No es una ilusión que fue creada y a la que ustedes fueron sometidos para aprender, crecer o como algún tipo de castigo. Absolutamente no. Es una ilusión que ustedes crearon. Que crearon con el propósito de experimentar sentimientos que no les es posible experimentar en otros niveles vibratorios.

Son realidades ilusorias. Los sentimientos son reales. Cuando todo está dicho y hecho, una vez más, cuando miren su llamado pasado lo recordarán por los sentimientos. Son los sentimientos los que afloran. Son los sentimientos los que desencadenan la memoria. Son los sentimientos los que importan. Son los sentimientos los que conservan.

Cuando interactuamos con ustedes en este nivel vibratorio lo hacemos con el propósito de intercambiar, si así lo desean, emociones y sentimientos. Muchas veces Elias (el canal) termina en lágrimas debido a las emociones y sentimientos que intercambiamos, por los sentimientos de amor incondicional que experimenta. Nosotros tenemos esos sentimientos. Compartimos esos sentimientos con mucha voluntad. Y es muy difícil en nuestro nivel vibratorio crear realidades que tengan la misma intensidad de sentimientos que ustedes experimentan en su nivel vibratorio, donde creen, mientras están en su estado consciente, que esto es real.

Ustedes creen en un marco temporal lineal. Y la creencia en ese marco temporal lineal les brinda la ilusión de que están creando una y otra vez, cuando en realidad existen en el ahora. Ese es un concepto que está más allá de la descripción mediante el uso de su vocabulario.

Cuando alteran su conciencia, cuando entran en un estado meditativo o en un estado de sueño y traen de vuelta varios recuerdos de ese estado alterado de conciencia, pueden recuperar un vislumbre o una comprensión de lo que es existir en el ahora. Y, en efecto, cada uno de ustedes, mientras está en su estado consciente, puede recordar y experimentar momentos, si así lo desea, en los que pareció estar completamente ajeno a esta ilusión del tiempo. O bien pasó muy rápidamente o permaneció absolutamente inmóvil. Simplemente no existió. Porque el tiempo es una ilusión, y cuando estaban involucrados en esos procesos estaban, en realidad, más cerca de la verdad en términos de la creación de su realidad que cuando parecen estar bien despiertos, conscientes y al tanto de todos los acontecimientos que ocurren a su alrededor desde una posición consciente.